Tala inicia su expansión en Latinoamérica: tecnología e inclusión financiera a escala regional
La inclusión financiera en América Latina enfrenta un contraste claro: mientras la mayoría de los adultos ya utilizan billeteras digitales, existe gente que aún carece de acceso a productos esenciales como el crédito.
En este contexto, Tala, plataforma de tecnología financiera regulada por Condusef anunció el inicio de su expansión regional, arrancando operaciones en Guatemala y con planes de llegar a otros mercados antes de que finalice el año.
Con más de 12 millones de clientes atendidos en el mundo y alrededor de USD 7 mil millones de dólares en préstamos otorgados, Tala se ha posicionado como uno de los actores más dinámicos del ecosistema fintech en latinoamérica. Tan solo en México, su mercado de crecimiento más acelerado, la compañía ha otorgado a casi cuatro millones de clientes en apenas ocho años, transformando la manera en que los mexicanos acceden al crédito.
“Gracias a nuestra experiencia en México, hemos aprendido que los servicios tradicionales siguen sin atender a la mayoría de la población. Nuestro objetivo es emplear la tecnología, tal y como lo hemos hecho en el mercado mexicano, para impulsar la inclusión financiera digital y abrir oportunidades para quienes han sido sistemáticamente excluidos en la región”, señaló David Lask, director regional de Tala para Latinoamérica.
El motor de este crecimiento es la plataforma tecnológica propia de la compañía que permite una expansión rápida y simultánea a nuevos mercados. Este ecosistema integra inteligencia artificial que simplifica y moderniza los productos financieros personalizados.
El modelo de Tala demuestra que la inclusión financiera puede ir más allá de las aplicaciones de préstamos: se trata de construir una infraestructura centralizada que combine la tecnología de vanguardia y la capacidad operativa de la compañía con su probada experiencia en el mercado mexicano.
La llegada a Guatemala no solo marca la entrada a un nuevo país, sino el inicio de una fase de crecimiento regional que busca ampliar el acceso al crédito en América Latina, impulsando a miles de personas a iniciar negocios, cubrir necesidades cotidianas y alcanzar sus metas financieras con herramientas más justas y transparentes.